¿ Qué es la Odontología SLOW?
Es una realidad que nunca se debe dejar de estudiar, sobre todo en el área de la salud se necesita una constante actualización. En la Odontología todo avanza muy rápido, lo que nos enseñaron en pregrado ya está obsoleto y es vital conocer e incorporar mejores insumos y técnicas que facilitan la ejecución de los tratamientos
Para nosotros ese estudio también es una búsqueda para brindar una buena y mejor atención y es así como llegamos a la ODONTOLOGÍA SLOW.

Adoptamos un método europeo de trabajo, gestión, organización, planificación y atención que es una necesidad en nuestro campo laboral, la Odontología SLOW.
La Odontología Slow tiene tres pilares, uno relacionado a la gestión y organización interna de la clínica, el segundo con los beneficios que otorga al dentista y el tercero y más importante es el que tiene relación con el paciente. Se trata de enfoque de atención dental basado en los principios del movimiento "Slow", que promueve una práctica más pausada, personalizada y centrada en el bienestar del paciente.
Principios de la Odontología Slow:
✅ Atención sin prisas: Se prioriza la calidad sobre la cantidad, dedicando más tiempo a cada paciente para garantizar tratamientos cuidadosos y menos invasivos.
✅ Uso de materiales biocompatibles: Se favorecen técnicas y materiales más naturales y respetuosos con la salud y el medio ambiente.
✅ Prevención y bienestar: Más allá de tratar problemas dentales, se busca prevenir enfermedades y mejorar la salud bucal a largo plazo.
✅ Enfoque integral: Se considera la salud general del paciente, no solo su boca, integrando hábitos saludables en la vida diaria.
✅ Reducción del estrés: Se crea un ambiente relajante en la clínica, evitando el trato impersonal y la atención masiva.
Este método es ideal para personas que buscan una experiencia más humana y menos acelerada en la consulta dental, con una atención más personalizada y consciente y siendo honestos también tiene que ver con nosotros para tener un entorno laboral cómodo, agradable, que nos den ganas de estar y no enfermarnos por exceso de trabajo, estrés laboral, o las típicas dolencias musculares por las posturas que tenemos al atender o su máxima expresión el bornout. Un dentista feliz y tranquilo atiende sin duda mucho mejor.
Por: Madelaine Pilquinao Godoy. Odontóloga Dēlos.